El domingo pasado, Deportivo Morón visitó a Chacarita por la séptima fecha del torneo, en un partido que estuvo marcado por los sucesos ocurridos dentro y fuera de la cancha. El Gallo se puso en ventaja en el primer tiempo con un gol de penal de Gastón González, pero jugó gran parte del complemento con diez jugadores debido a la expulsión temprana de Ivo Costantino. En la segunda mitad, Rodrigo Salinas empató para Chacarita, dejando el marcador 1-1.

Sin embargo, el empate quedó opacado por los incidentes ocurridos al finalizar el encuentro. Barras de Chacarita, miembros de la facción Villa Maipú, accedieron hasta la zona de vestuarios y atacaron a dirigentes de Deportivo Morón. Entre los principales afectados estuvo el vicepresidente del club, Juan Carlos Pini, quien sufrió un golpe en la cabeza.

En diálogo con La 94 Sport*, Fabián Kaplan, jefe de seguridad de Morón, explicó que según dirigentes de Chacarita, el operativo de seguridad contaba con 300 efectivos policiales. Pero al momento del incidente había sólo cuatro. Kaplan agregó: “Nosotros en Morón con los operativos policiales no tenemos problemas, cada uno sabe lo que tiene que hacer. El personal policial de Morón es mil veces más profesional que esos muchachos que estaban ahí”

Los disturbios continuaron fuera del estadio, en la vía pública y la policía utilizó balas de goma para dispersar a los agresores. Como resultado, los incidentes dejaron tres detenidos.

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