En un multitudinaria marcha, la comunidad educativa de Moreno junto a organizaciones sociales, políticas y sindicales reclamaron el esclarecimiento del secuestro y tortura de Corina de Bonis, docente del CEC 801 ocurrido en el día de ayer. Por estos días, la comunidad educativa del distrito se encuentran en reclamo permanente luego la explosión en la que fallecieron Sandra Calamano y Rubén Rodríguez, vicedirectora y el auxiliar de la Escuela 49.

En cobertura de FM En Tránsito, Gladys Ocampo, docente de la EP 68 de Villa Nueva repasó que desde aquel 2 de agosto “estamos exigiendo justicia. Ahora pedimos que estas cosas no sucedan más. Estamos dándole de comer a los chicos porque el Estado no lo está haciendo”, agregó en clara alusión al ataque que sufrió De Bonis, docente que impulsa ollas populares, en cuyo abdomen los secuestradores escribieron con un punzón “Ollas no”. “Estamos cansados de se ninguneados y denigrados”, enfatizó la mujer.

De Boni fue secuestrada, golpeada, introducida en un baúl de un auto por tres desconocidos. Luego fue torturada con un punzón. Los docentes del CEC 801 realizan ollas populares y clases públicas en las plazas del barrio, ya que la escuela está cerrada luego de la explosión, al igual que muchas establecimientos del distrito. Días atrás del ataque que sufrió De Boni, los docentes ya habían sido amenazados.

En conferencia de prensa, Roberto Baradel, responsabilizó a la gobernadora María Eugenia Vidal, al ministro de Seguridad de la provincia, Cristian Ritondo  y al ministro de Educación, Gabriel Sánchez Zinny, por la seguridad de los maestros de Moreno.

Por su parte, José Bustos, docente de la EP 22 del Barrio 25 de Mayo, denunció que Corina “estaba atendiendo el reclamo que no atiende el Estado que es darle de comer a los chicos”, a la vez que se refirió a la masiva marcha. “Es una manera de decirle a la sociedad que a pesar de las amenazas nosotros no tenemos miedo porque sabemos que estamos en el camino correcto”.

Por último, Hernán, docente de la Escuela 39 de Moreno afirmó que “se sienten seguros pero no con miedo. Hoy más que nunca estamos de pie y no tenemos miedo. Si tocan a uno nos tocan a todo”. A su vez, agregó que la agresión que sufrió Corina les recuerda a los momentos más oscuros del país. “Por eso marchamos, y para reclamar juicio y castigo a los culpables de la muerte de Sandra y Rubén”.