[Revista Güarnin! n° 120. Por Sergio Lucarini]
Hace un año atrás los que advertíamos en voz alta lo que se venía con el triunfo de Cambiemos éramos desacreditados sin más. Desde este espacio en varias oportunidades propusimos votar mirando los prontuarios y no las promesas a futuro. Como ejercicio de memoria te proponemos revisar alguna de las cosas que el presidente Macri sostuvo la noche del debate pre-ballotage:
“Nuestro único objetivo es trabajar todos los días para que vos vivas un poco mejor y para que te sientas más seguro”.
“Nosotros tenemos como objetivo económico lograr una Argentina con pobreza cero”.
“Quiero trabajar para que accedas a tu primera vivienda: un millón de créditos a treinta años”.
“Hay que desarrollar la economía, que hay expandir la economía, no ajustar. Yo no he hablado nunca de ajustar”.
“Y abrir la economía es lo último que he dicho; hay que cuidar el empleo, hay que sentarse con cada pyme, con cada pequeño productor”.
“Convoco a nuestros científicos y al buen trabajo del Conicet para que tenga un mayor impacto social”.
“Para eso tenemos algo maravilloso, son nuestros docentes, a los cuales tenemos que apoyar, tenemos que reivindicar, darles el prestigio social, pagarles bien”.
“El problema de este país, es un gobierno que ha mentido, que ha ocultado los problemas. En realidad lo han ocultado y mentir es gravísimo, porque ha ocasionado esto: que el país no pueda crecer”.
“Pero yo sí me tengo confianza a armar el mejor equipo de los últimos cincuenta años, convocando a las mejores de este país, para crear oportunidades de progreso y que todos podamos vivir mejor”
Cuando se cumplió un año del debate algunos sugirieron instalar el día nacional de la mentira.
Hubo engaño, nadie puede negarlo. Pero para que el engaño funcione hacen falta dos. El que miente y el que quiere creer mentiras de un hombre con grueso prontuario…